
La ira es un ladrón que se apodera de las facultades del hombre y las utiliza ciegamente y de forma destructiva. Casi siempre quien pierde la paciencia pierde también temporalmente su capacidad de pensar lógicamente.
Aprender a amar es la lección más difícil para la persona que ama a Dios; justamente por eso debería ser la que más nos esforcemos por aprender.
[Spanish: Bitterness versus Love]